MUCHAS GRACIAS A LAS CHICAS DEL BLOG MAS QUE VAMPIROS!!!!!

HOLA!!!!! Hoy me he puesto muy contenta cuando las chicas de este magnífico blog nos han hecho un regalo a todos los que las seguimos, leemos o simplemente visitamos!! muchas gracias chicas!!! mirad, mirad que bonito detalle han tenido:


De nuevo, muchas gracias chicas!!!!
Pero otro de los regalos ha sido este magnífico relato escrito en su totalidad por MONTY!!!
Todo lo que leeais es de su autoría, y es precioso! os pongo un extracto, y el enlace directo a la pagina para poder seguir leyendo!!!!
Un besazo chicas, sois geniales!!! y un besazo doble para ti, Monty, por ser tan buena escritora!!!!!!

LA NOCHEBUENA DE MARCUS Y KIRA, por Monty.

El salón estaba presidido por una enorme chimenea de casi dos metros de altura, que caldeaba la enorme estancia con techos a más de siete metros del suelo y gruesas cortinas de terciopelo rojo elegidas apropósito para aquella época del año. Estas estaban retiradas y se podía ver caer la nieve sobre el ya blanco suelo de los jardines. El fuego crepitaba , junto con múltiples candelabros, destellaba un fulgor anaranjado sobre los muebles de la estancia. En una esquina el enorme abeto , cortado recientemente de las inmediaciones del olvidado palacete, recibía la luz del fuego. Las miles de escarlatas bolas centelleaban con magia repartiendo brillos rojos sobre el pelo rizado de Kira, sentada en la mullida alfombra persa de color crema. Ella le aguardaba con los ojos cerrados dejando que el calor de las llamas acariciaran sus parpados y mejillas. Cuando no puedes ver el sol cualquier calidez es un manjar a saborear lenta y concienzudamente.


Llevaba el vestido rubí que Marcus le había regalado hacia esa noche exactamente un año. Era una copia exacta a su vestido preferido, uno de tantos que se quemaron en la revuelta siglos atrás. El también le regalo aquel. Replica secreta e idéntica, al que Marcus consiguió para la emperatriz Sisi de Austria. Cuando el se dedicaba al comercio entre este y su país , Rusia. La emperatriz le hubiera despedido de saber que ella no era la primera mujer, que en exclusiva llevaba esos ropajes. Pero a el no le importo lo más mínimo cuando su, por entonces, delicada humana cayo en éxtasis al ver el vestido. Marcus no pudo resistirse a regalárselo y encargar otro para Sisi. Cuantas maravillosa prendas se habían perdido en aquel desastre provocado. No es que ahora con su actual trabajo como secretaria y socia de Marcus los pudiera llevar, pero siempre podría ponérselos en ocasiones como aquella.


Las enormes puertas del salón se abrieron dejando que una brisa helada hiciera bailar las llamas del fuego y las velas. Estas se cerraron. Sobre el sonido de la voz de Sinatra, que cantaba melodiosamente “Have Yourself A Merry Little Christmas” los pasos de Marcus resonaron. Ella continuo con los ojos cerrados, esperando percibir su olor suave a madera y sándalo. Sintió como el rozaba suavemente los rizos de su larga melena rubia oscura que al mecerse le hizo cosquillas sobre la piel de la espalda que quedaba al descubierto.


Marcus se sentó en la otomana de terciopelo color caramelo. Y se deshizo de sus zapatos para no estropear el delicado pelo de la alfombra. Fue a la mesa para servir un poco de Don Periñon en la nueva cristalería de bohemia. Kira había destruido a su predecesora en un acceso de furia con el. Ella estaba enojada por algo que el no pudo descifrar. Pero sabia que el razonamiento que ella le dio en ese momento no era el verdadero motivo de su enfado. Decía estar frustrada por que el cabello ya no se llevaba ni tan largo ni tan rizado como se le había quedado ha ella después de su transformación. Y ahora ,como su cambio era imposible, iba irremediablemente fuera de honda. Kira tenia ese tipo de rabietas de siglo en siglo y el casi siempre ignoraba los verdaderos motivos aunque sabia perfectamente que nunca eran los que ella decía.


Kira permanecía en silencio recreándose ante el calor del hogar y el tomo asiento a su izquierda.


-Querida.- la llamo en un susurro con su embriagador acento ruso.


Ellos hablaban casi cualquier idioma conocido gracias a los viajes de negocios Marcus y a haber tenido prácticamente una eternidad para aprenderlos. Para regañar usaban el alemán, para hablar de negocios el ingles y para amarse cualquiera que se les antojara romántico en aquel momento. Pero Marcus se negaba a desprenderse de su acento natal fuera cual fuera la lengua en la que se pronunciara. Ahora la hablaba en ruso y su deje era más pronunciado aun. Esto hizo que Kira recordara los viejos tiempo y un escalofrío recorrió su espalda. Le miraba a esos ojos azul profundo. Antes de tomar la copa que el la ofrecía, retiro un mechón negro azabache de su frente y el la sonrío complacido.


-Gracias. -dijo muy bajito en ruso al igual que el y le beso en aquellos rellenos labios que a el tanto le acomplejaban pero que ella adoraba.

Si queréis seguir leyendo, que estoy segurísima de que si, aqui os dejo el enlace directo al relato: La nochebuena de Marcus y Kira.

Un besazo q tod@s!!!! Y FELIZ NAVIDAD!!!!!!!!!!!!!